Ante el recrudecimiento de la crisis que se presenta en la parte oriental de la isla y sus consecuencias sobre la dinámica de vida del pueblo haitiano, sin que al momento exista una autoridad con capacidad de poder y de unificación para resolver la problemática, cuyos efectos inciden negativamente en la República Dominicana, especialmente en la región fronteriza, las Diputadas y Diputados de la Bancada Parlamentaria ante el PARLACEN expresan su preocupación por las impredecibles consecuencias que podría tener esta situación en el territorio dominicano.
Desde que se generó esta crisis de ingobernabilidad en Haití, tras el magnicidio del presidente Jovenel Moise, hecho que profundizó la terrible inseguridad de esa población, la República Dominicana ha mantenido una actuación soberana en el marco de sus leyes y de los convenios internacionales, difundiendo al mundo su posición de que no es posible que nuestra nación asuma las responsabilidades de la crisis en el vecino país, lo cual corresponde al propio pueblo haitiano y en lo concerniente, a la comunidad internacional.
En este orden, el tema se ha convertido en centro de debate, preocupación y propuesta de la opinión pública nacional, en defensa de nuestra soberanía y de la seguridad nacional.
La más reciente situación que empeora dicha crisis es la construcción de manera unilateral de un canal de riego y colocación de hormigón del lado de Haití en el rio Masacre que comparten ambos territorios. Las autoridades dominicanas han pedido la detención de esta improcedente construcción violatoria de todos los convenios y Tratado de Paz, Amistad, Arbitraje y Frontera, suscritos entre las partes, desde el siglo dieciocho, en 1926 y 1929, sin que la parte haitiana obtempere a este llamado.
Con el cierre temporal de la frontera con la provincia Dajabón, activa fuente de intercambio comercial binacional, dispuesto por el Consejo de Seguridad Nacional, entre otras medidas anunciadas por el presidente dominicano, se espera que mermen las tensiones actuales. Sin embargo, al paso de los días y ante la ausencia de posibles soluciones de corto plazo a la vista por parte de los empresarios y particulares en Haití que continúan la construcción del canal, se impone un llamado al diálogo, en el marco del Derecho Internacional, para evitar un colapso diplomático entre dos países y pueblos con orígenes, historias y costumbres distintos, que deben convivir soberanamente compartiendo una misma isla.
Apoyamos toda medida de diálogo y la aplicación estricta de las leyes dominicanas en materia migratoria y territorial. Asumiendo siempre, la naturaleza del Parlamento Centroamericano como órgano regional y permanente de representación política y democrática de la Integración Centroamericana, con el objetivo fundamental de la realización de la integración de Centroamérica y República Dominicana como Región de Paz, Libertad, Democracia y Desarrollo.
Septiembre 12, de 2023